La Alimentación en las personas Mayores

La alimentación en las personas mayores es un factor de gran importancia y al cual hay que prestar mucha atención, ya que de lo contrario podría aparecer hiporexia o falta de apetito, lo cual se traduce en una disminución del apetito en ancianos. Este síntoma tiene consecuencias graves para la salud y afecta aproximadamente a 6,5 millones de ancianos en España.  Un síntoma que debe tratarse rápido ante la aparición de cualquier síntoma ya que, a menudo, puede suponer problemas graves de salud que pueden suponer un riesgo alto para la persona que lo sufre.

La alimentación es clave para las personas mayores, diríamos que hasta esencial a la hora de reducir el riesgo de enfermedades graves relacionadas directamente con la nutrición. Las proteínas suelen ser las grandes olvidadas y sacrificadas, por ello hay que intentar que las comidas sean lo más equilibradas posible.

Desde Vitalservit, queremos ayudar dando algunas las claves para una correcta dieta en personas mayores.

Estas personas son más delicadas y cualquier contratiempo puede convertirse en algo más serio, por lo tanto, debemos tener especial cuidado con su alimentación, para que no les influya negativamente en su estado de salud.

Cuando una persona llega a una cierta edad, el riesgo de desnutrición aumenta considerablemente y puede ser origen de situaciones graves. Las necesidades nutricionales de una persona mayor son muy superiores a las de una persona más joven, por lo que podemos decir que las necesidades energéticas vienen determinadas por tres causas, en función a la edad, la actividad física que tiene en su día a día y a posibles enfermedades asociadas.

Dieta Mediterránea

Los menores de 65 años deben tener una alimentación normal: variada, sana y equilibrada (Dieta Mediterránea a ser posible). Los que tienen entre 65 y 80 años deben vigilar sobre todo el aporte suficiente de nutrientes y evitar, en caso de enfermedad, dietas que puedan provocar alguna deficiencia nutritiva, en estos casos siempre recomendamos acudir al médico de familia para una correcta supervisión de la alimentación. En los mayores de 80 años el riesgo de desnutrición se considera ALTO y deben por lo tanto ingerir un mínimo de 35 calorías Kilogramo por día. Las personas mayores por regla general suelen presentar una serie de deficiencias o carencias nutricionales. El déficit de proteínas también es un riesgo para tener en cuenta porque reduce la fuerza muscular, provoca debilidad, fatiga, depresión y disminución de la inmunidad. De ahí que la desnutrición proteico-energética constituye el primer riesgo para la salud en la tercera edad.

El Calcio

El Calcio, es un elemento importante en los mayores dado que su falta puede provocar problemas óseos, se absorbe peor que otros elementos y aumenta la excreción renal en estas personas (expulsión de los desechos) por lo que hay que vigilarlo.

Las Vitaminas

Las vitaminas A, B, C y D. Debemos tener en cuenta que en una persona mayor hay trastornos en la absorción digestiva y que determinados tratamientos pueden provocar una carencia de estas vitaminas. Es recomendable que los mayores realicen más comidas, pero menor cantidad, al menos tres veces al día (como mínimo) suelen tener más apetito por la mañana, aunque este se va reduciendo a lo largo del día, por lo que tenemos que aprovechar para hacer una comida rica en proteínas.

Los lácteos

Los diferentes tipos de alimentos tienen sus características especiales que los hacen a todos imprescindibles, por lo que, sino hay enfermedad alguna no se debe descartar ninguno. Los derivados lácteos permiten alimentarse e hidratarse, y aportan muchos nutrientes esenciales, pero ojo una alimentación exclusivamente a base de lácteos puede ocasionar déficit de ciertas vitaminas.

Carnes, Pescados y Huevos

El grupo de carnes, pescados y huevos son por su riqueza la fuente indispensable de proteínas animales.

Las Frutas, Verduras, Cereales y Legumbres

Las frutas y verduras son un aporte esencial de minerales, también favorecen el tránsito intestinal, lo mejor para el cuerpo es que se consuman crudas. Los cereales y leguminosas aportan vitaminas del grupo B y proteínas vegetales.

El Agua

Por último y para acabar hay que insistir en que el agua es una necesidad vital. El mayor debe ingerir entre un litro, y litro y medio al día; es muy importante evitar que beba menos de esa cantidad, dado que con la edad disminuye la sensación de sed y no beben más porque creen que no lo necesitan.

En Vitalservit contamos con equipos especializados en alimentación y nutrición que te ayudarán a informarte y a seguir una dieta equilibrada para el cuidado de personas mayores en Madrid. Gracias a esto te ayudaremos a poner en práctica los mejores cuidados para que tus mayores se encuentren siempre saludables.